Implantes Dentales: Lo Que Hay Que Saber
Actualmente, los implantes dentales son una de las más seguras y efectivas soluciones que existen para reemplazar los dientes perdidos. Además, son una excelente opción a largo plazo para restaurar la sonrisa y por qué no, la autoconfianza de los pacientes.
Sin embargo, muchos pacientes llegan a tener dudas o incertidumbre sobre si es la solución que necesitan. ¡Hoy queremos ayudarte a disipar esas dudas!
Comencemos explicando qué es un implante dental:
Los implantes son elementos metálicos que se ubican quirúrgicamente en los huesos maxilares, debajo de las encías. Son parecidos a una raíz artificial que se diseña para adaptarse a la dentadura del paciente, su principal función es remplazar el diente perdido y dar un agradable aspecto como si se tratase de un diente natural.
¿Cómo funcionan los implantes dentales?
El implante se fusiona con el hueso mandibular, proporcionando un soporte estable para los dientes artificiales. Las prótesis y los puentes colocados sobre los implantes no se deslizan ni se corren en la boca, lo cual es una ventaja especialmente importante para la masticación y el habla, en general, los implantes dentales brindan una sensación mucho más natural y cómoda que los puentes y prótesis ordinarios.
Ventajas de los implantes dentales:
- A diferencia de los puentes tradicionales que deben sujetarse a los dientes de ambos lados del espacio vacío, con los implantes no es necesario desgastar los dientes adyacentes.
- Aspecto natural y estético
- Comodidad para el paciente
- Solución a largo plazo (con el cuidado adecuado, pueden durar toda la vida)
- No generan mal aliento
- Es uno de los mayores avances de la odontología en los últimos 40 años
- Elaborados de titanio y otros materiales que se integran naturalmente con la estructura ósea del cuerpo humano
- Un vez colocado el implante, no es necesario removerlo para limpiarlo
¿Cuándo no son tan convenientes?
Antes de optar por un implante dental, se deben realizar una evaluación precisa con su dentista. Es muy importante contar con un buen estado de salud, tener encías sanas y hueso adecuado que soporte el implante, además, es muy importante que el paciente asuma el compromiso de mantener una buena salud bucal. Enfermedades crónicas como la diabetes o leucemia pueden interferir con la curación después de la cirugía, así que las personas con estos padecimientos no son buenos candidatos para los implantes dentales.
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